Utilizamos cookies propias y de terceros, para realizar el análisis de la navegación de los usuarios. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso.
Puedes cambiar la configuración u obtener más información.
aceptar

Fregaderos de cocina: tipos, materiales y formas

- Categorías : Default

Mantener moderna y bien cuidada una casa no es una tarea fácil. De hecho, en la mayoría de ocasiones suele ser necesario recurrir a caras e incómodas reformas para ello. Sin embargo, también es posible darle un aire nuevo a algunos rincones del hogar sin tener que invertir demasiado. Por ejemplo, hace algunas semanas te ofrecimos trucos para renovar tu baño barato y sin obras.

Y hoy queremos continuar por ese camino pero con otra parte de la vivienda: la cocina. Existen muchísimos consejos y trucos de decoración relativos a la cocina. Sin embargo, si lo que buscas es darle un aire renovado sin tener que invertir muchísimo, centra tu mirada en una parte concreta: el fregadero. Te contamos todo lo que necesitas saber sobre los materiales en que se fabrican y las diferentes formas que existen.

Los mejores materiales para un fregadero

Lo primero que debes tener en cuenta en lo relativo al material es elegir uno que se adapte al resto de tu cocina. Además de que sea óptimo para el uso que vayas a darle cada día. En este sentido, existen muchas opciones que puedes tener en cuenta. A continuación vamos a repasar cuáles son los materiales más destacados y populares para los fregaderos de cocina:

  • Acero inoxidable: estos son los más tradicionales y frecuentes de todo, además de los más baratos. Aunque lo cierto es que existen diferentes calidades de acero y algunas de ellas podrían incrementar el presupuesto. Sus ventajas tienen que ver con una gran resistencia a golpes y altas temperaturas, además de ser bastante versátiles a nivel de diseño.

  • Resina: están disponibles en diferentes texturas y colores, por lo que a nivel de diseño son mucho más llamativos que los de acero inoxidable. Por contra, son más débiles frente a los golpes, rayaduras y el calor.

  • Cuarzo: estos fregaderos, tal y como ocurre con los de resina, están disponibles en muchísimos colores y estilos diferentes. Sin embargo, son más resistentes que los de resina.

  • Cerámica: son unos de los más demandados por quienes quieren dar un estilo rústico o vintage a su cocina. Son muy resistentes a golpes y arañazos, aunque su precio es bastante elevado.

  • Mármol/granito: este tipo de fregaderos suelen integrarse en la encimera y, a pesar de que se manchan con facilidad, son los más resistentes de todos.

¿Qué formas de fregaderos existen?

Además de tener en cuenta el material del fregadero, también es importante pensar en la forma del mismo. Existen muchas posibilidades por las que puedes decantarte, aunque las más comunes son estas:

  • De un seno: son los más frecuentes de todos. Una cubeta de gran tamaño que también puede incluir escurridor y que queda muy bien en cualquier encimera.

  • De dos senos: para las cocinas grandes una opción bastante común es la de instalar dos senos. Es decir, dos compartimentos separados que forman parte del mismo fregadero.

  • Esquinero: esta forma está pensada para los fregaderos con cocinas de formas irregulares.

Share

Añadir un comentario

Volver arriba