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Fregadero doble o simple: ¿cuál elegir?

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A la hora de amueblar una casa, ya se trate de una obra nueva, una reforma o simplemente de algunos cambios para mejorar la vivienda, son muchas las cosas a tener en cuenta. Por este motivo en anteriores ocasiones te hemos hablado de aspectos relativos a diferentes partes del hogar. Por ejemplo, hace algunas semanas pusimos el foco en el cuarto de baño con el artículo ‘Grifo de ducha: cómo saber cuál elegir’.

En esta ocasión, por contra, no hablaremos sobre los cuartos de baño, sino que centraremos la mirada en la cocina, una de las partes más importantes del hogar. Y, en concreto, lo que haremos será hablar de un artículo muy concreto: el fregadero. Existen de muchos tipos diferentes, aunque lo más habitual es decantarse ente uno simple o uno doble. Pero… ¿Cuál es mejor?

¿Qué tipo de fregadero elegir para tu hogar?

Existen muchos trucos para amueblar correctamente la cocina. Sin embargo, si hablamos del caso concreto del fregadero, aunque existen muchos modelos diferentes, todos los caminos nos llevan a elegir entre uno simple o uno doble. Y como lo más probable es que a la hora de amueblar tu cocina te surja esa pregunta, vamos a detallarte cuáles son los principales puntos fuertes y débiles de cada uno de estos tipos de fregadero.

Fregadero simple

Primero hablaremos de los fregaderos con un único seno, conocidos como simples. Al tener solo un único hueco ofrecen múltiples ventajas. Las más destacadas son las siguientes:

  • Ocupa menos espacio: aunque sea grande, sus dimensiones siempre serán más reducidas que las de un fregadero doble. Esto hace que sea una opción ideal para una cocina que no cuente con mucho espacio o en las que se necesite más encimera.

  • Instalación sencilla: su instalación es mucho más fácil que la de uno doble, ya que no necesitarás dos desagües para el agua. De este modo es bastante posible que puedas instalarlo por tu cuenta sin la ayuda de un fontanero.

  • Más espacio: si cuentas con un lavavajillas no necesitarás uno doble ya que solo lo utilizarás para enjuagar los platos. Esto dará más amplitud a toda tu cocina.

Por otra parte, debes saber que no todo son ventajas. Como principales desventajas encontrarás un mayor gasto de agua que con respecto a un fregadero doble. Además del hecho de contar con menos espacio en su interior.

Fregadero doble

Por su parte los fregaderos de dos senos, los dobles, también son una opción a tener en cuenta. Para empezar, permiten aprovechar mejor los espacios y rincones poco utilizables de la cocina sin que esto afecte a su estética. Además, permite ahorrar agua al lavar los platos y son bastante más amplios y profundos que los fregaderos simples, lo que hará que su uso sea mucho más cómodo.

En lo relativo a las pegas, lo cierto es que también tienen algunas desventajas. La mayor de todas tiene que ver con su instalación, que suele ser más compleja y es aconsejable que la realice un fontanero. Esto se debe a que necesitarás dos drenajes y un doble sifón que se conecten finalmente con el desagüe.

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