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¿Cómo preparar tu jardín para la primavera?

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Durante los últimos meses, y también durante las próximas semanas, el frío ha sido el auténtico protagonista. A pesar de que no ha sido un invierno demasiado helador, lo cierto es que los meses de enero y febrero han registrado temperaturas bastante bajas. Y se espera que en los próximos días la nieve y el hielo vuelvan a hacer acto de presencia en España. Precisamente por ello hace algunas semanas te contamos qué hacer para cuidar tu jardín durante el invierno.

Y en nuestro último post hablamos de cómo aislar una pared del frío y ahorrar energía. Cuestiones clave para afrontar los días más fríos del año. Sin embargo, aunque aún quedan algunos días más de frío, la primavera ya está a la vuelta de la esquina. Algo que implica una subida de las temperaturas, días con más horas de sol y, sobre todo, plantas y jardines mucho más coloridos. Así que hoy te traemos algunas claves para que prepares tu jardín para la llegada de la primavera.

4 claves para preparar el jardín para la primavera

Hay muchas cosas que puedes hacer para poner a punto tu jardín de cara a la primavera. De hecho, esto es algo que resulta fundamental ya que durante esta época del año será cuando mejor luzcan tus plantas. Así que, precisamente por ello, es fundamental comenzar desde ya para que llegados los meses de marzo y abril no tengas nada de lo que preocuparte. A continuación te contamos los aspectos más relevantes en este sentido.

1. Malas hierbas

Habitualmente durante los meses de invierno se presta menos atención al cuidado del jardín, por lo que es bastante frecuente que aparezcan malas hierbas en esta época del año. Como primer paso para prepararte para la primavera debes erradicarlas todas. Ten en cuenta que es necesario que las arranques de raíz para que no vuelvan a crecer, o en unas pocas semanas volverán a estar ahí de nuevo.

2. El terreno

Uno de los efectos del frío, aunque en la mayoría de ocasiones no es demasiado visible, tiene que ver con que las bajas temperaturas apelmazan la tierra. Y esto hace bastante difícil que la vida pueda volver a brotar en ellas. Así que, ya sin malas hierbas cava entre 20 y 30 centímetros y remueve un poco la tierra. También puedes agregar algo de abono y colocar sustrato nuevo para mezclaro con tu tierra.

3. Sistema de riego

El frío suele afectar a los sistemas de riego, que no suelen utilizarse durante el invierno. Así que es importante que puedas comprobar cuál es el estado en el que se encuentra todo: mangueras, salidas de agua, aspersores, goteros… Si alguno está en mal estado puedes repararlo o cambiarlo por uno nuevo.

4. Sanear el césped

Otra cuestión importante tiene que ver con el césped, que suele sufrir también bastante en los meses más fríos del año. Ahora, con la llegada de la primavera, es el momento de mimarlo un poco para que vuelva a lucir espectacular. Para ello debes volver a cortarlo con cierta regularidad y, poco a poco, volver a regarlo y aumentar la frecuencia según suban las temperaturas. También es aconsejable volver a plantar césped en las zonas en las que falte hierba.

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