No hay lugar a duda: la herramienta más utilizada para extraer las aceitunas de los olivos son los vareadores. Sin embargo, no todo el mundo tiene claro cómo funciona un vareador o las ventajas que pueden llegar a ofrecer. Desde hace muchísimos años se recurre a esta técnica, aunque lo cierto es que el vareo de la aceituna ha avanzado mucho en los últimos tiempos.
Y precisamente por ello, por sus innovaciones y ventajas, hoy vamos a hablar de estas herramientas en esta nueva publicación. De modo que si alguna vez te has preguntado cómo funcionan los vareador, que beneficios ofrecen y qué tipos existen, vamos a dar respuesta a todas tus cuestiones. Así que no te pierdas lo que vamos a contarte a continuación.
¿Qué ventajas ofrece un vareador para recoger olivas?
Lo más seguro es que hayas llegado a esta publicación buscando por qué tanta gente recurre a estas herramientas a la hora de varear un olivo. Y esto es algo que podemos resumir hablando de cuatro ventajas muy concretas:
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Utilizar un vareador hace más fácil el trabajo, ya que permite que la recogida resulte mucho menos cansada que hacerlo de forma manual.
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Estas herramientas protegen mejor los árboles, por lo que es el sistema adecuado para recoger la aceituna sin dañar al olivo.
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Gracias a que funciona de forma mecánica, el tiempo de trabajo se reduce de manera considerable. Esto permite una recolección más rápida y eficaz.
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Al contar con mangos de gran extensión permiten recoger la aceituna sin accidentes ni riesgos, ya que no es necesario subirse al árbol.
Vareadores de olivos: qué tipos existen
Cuando hablamos de vareadores de olivos existen muchos tipos entre los que podemos elegir. Para hacerlo todo más sencillo, vamos a clasificar estas herramientas en base a su terminación. En ese sentido, encontramos dos tipos: los de peine y los de gancho.
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Vareadores de peine: estos vareadores aportan una gran agilidad y confort a la hora de ser utilizados, lo que permite varear más olivos en menos tiempo, optimizando así el trabajo. Sus ventajas más destacadas tienen que ver con un precio más económico, su manejabilidad sencilla, su escaso peso y que utilizan alimentación eléctrica.
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Vareador de gancho: por otra parte, el vareador de gancho, también denominado como ‘horquillo’, hacen que el olivo se desprenda del árbol haciendo vibrar sus ramas. Entre sus ventajas encontramos que son más rápidos que los de peine, hacen menos daño a las ramas del olivo y que también se puede usar en almendros, nogales y otros árboles.
A parte de estos dos tipos, también podemos diferenciar los vareadores en base a su activación. En este sentido, existen dos grandes tipos: los de motor eléctrico y los de gasolina. Los primeros son bastante ligeros, menos ruidosos y ofrecen un proceso de vareado delicado, además de alimentarse con una batería. Por otra parte, los que usan gasolina son más pesados pero ofrecen un rendimiento mayor y son más fáciles de transportar. Esto hace que estas sean más adecuadas para superficies muy amplias.