Si tu casa cuenta con un jardín, lo normal es que pongas en el diferentes plantas para darle un toque de color y un aspecto inmejorable. Sin embargo, todo esto requiere posteriormente de realizar labores de mantenimiento y cuidado. Sobre ello hablamos hace una semana en nuestro post ‘Cuándo y cómo realizar una poda correcta’.
Sin embargo, además de saber cómo cuidar las plantas, también es imprescindible contar con el material adecuado para mantener tu jardín. Porque de nada sirven los trucos caseros de jardinería si no dispones del material necesario para cuidar tus plantas. Y como queremos que conozcas qué herramientas deberías usar para preparar tu jardín, hoy vamos a hablar de una que posiblemente no sepas qué es: la azada.
¿Qué es una azada?
Para empezar vamos a explicar exactamente qué es esta herramienta. Se trata de un artículo muy versátil que se utiliza tanto en el campo como en el jardín y que sirve para remover pequeñas cantidades de tierra. Esto permite para mantener controladas las malezas de alrededor de las plantas, para cortar malas hiervas y para preparar la tierra para futuras cosechas.
Los tipos de azadas que existen
Lo cierto es que para hablar de azadas hay que tener en cuenta que existen diferentes tipos y sus características varían bastante. Eso sí, todas están formadas por los mismos componentes: una lámina cortante en su borde frontal y un mango para sujetarse que normalmente es de hierro o madera.
A continuación vamos a contarte cuáles son las azadas más utilizadas en la actualidad:
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Azada colineal: esta herramienta tiene una hoja estrecha y cortante y suele usarse para cortar malas hierbas de forma cómoda y rápida. Sus hojas son muy afiladas, lo que permite cortar hierbas con una simple pasada.
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Azada holandesa: en este caso el diseño es especial, ya que su finalidad es la de cortar las malas hierbas que están bajo la superficie. Su cabeza es un lazo de metal plano.
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Azada estribo: su diseño cuenta con una cuchilla de doble filo que se dobla para formar un estribo.
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Azadón dego: esta azada es la más popular de todas y suele utilizarse para cultivos comunes en los jardines. Cuenta con un cabezal fuerte y una hoja muy amplia en forma de delta.
Además de todas estas azadas existen otros tipos como las binadoras, las oscilantes o los almocafres.
¿Qué tener en cuenta para elegir tu azada?
Vale, ya conoces mejor estas herramientas. Pero, ¿cuál de todas ellas deberías elegir? Lo cierto es que todo depende del uso que vayas a darle y de las características de tu jardín y plantas. Ten en cuenta estos detalles para elegir adecuadamente:
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Tipo de suelo: si tu suelo es duro necesitarás una más pesada y firme, mientras que si es ligero podrás elegir una de menor peso.
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Para qué la necesitas: ten claro para qué usarás la azada, lo que te permitirá determinar el tamaño de hoja que necesitas y el presupuesto que puedes invertir en ella.
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Longitud de mango: procura elegir una que se adapte a tu estatura, permitiéndote trabajar con ella en una postura cómoda.